YA NO JUEGO

La lotería es la recaudación de impuestos voluntaria.

Tiene efectos narcotizantes sobre las aspiraciones
sociales.
Su volúmen de ventas se dispara en las crisis por la
desesperación y es analizado como indicador
sociológico.
Persigue tus sueños ciudadano.

Un cortijo, un brillante, un chalé, un cochazo , un viaje a la India. La lista es larga y cubre las aspiraciones de millones de españoles. Su mensaje implícito es escandalosamente explícito.

Para alcanzar los objetivos soñados hay que jugar a la lotería , perseguir lo que uno anhela no es un estímulo para superarse profesionalmente, sino adquirir un boleto y fantasear mano sobre mano, hasta las nueve de la noche, comprobar que no te ha tocado y repetir la misma estéril maniobra al día siguiente y en los sucesivos.

Mis sueños y aspiraciones siendo materiales no están a la venta.

En vez de un chalé preferiría ciudades limpias, silenciosas , ajardinadas y tranquilas.

En vez de un coche deportivo una red ferroviaria eficiente, en vez de un viaje a la India una formación y educación personal que ayudasen al sosiego del espíritu.  En vez de un brillante un sistema sanitario universal que me garantice la salud de por vida…

Mis sueños solo los puede satisfacer una buena organización social, auspiciada por el Estado.En vez de eso el Estado me impulsa a perseguir falsamente falsos sueños,

¡No juego!.